
Paula Toledo todavía
Por Bautista Franco.- Nuri Ribota sale del edificio ilustre, blanco, grande. Se agarra de un bastón de aluminio que parece más alto que ella. Su cuerpo está golpeado por los años que han pasado, por la desidia, por la bronca. La llevan sus familiares del brazo, nadie sabe si la sostienen por la edad o como señal de apoyo, pero no se dice nada, todos quisieran sostenerla.
En el exterior un pequeño grupo de manifestantes, o podría decirse de personas que esperan en actitud de protesta, están pintando remeras, aguantando el calor, mirando de reojo las vallas que levantó la Policía más temprano. Las horas han sido eternas. Nuri camina a paso cansado y hombres y mujeres se levantan y se acercan a la mujer vieja de anteojos que con voz cálida les agradece: “Paula se merece que estemos acá, que sigamos por ella”… Continúa leyendo Paula Toledo todavía