Por Gloria Kreiman
Ana Katz es una de las directoras argentinas más valiosas, que no es solo directora. También escribe, produce y actúa, en sus películas y en las de otros. Y también ha dirigido obras de teatro.
Lo que me gusta de Ana Katz, como realizadora, como directora, es que tiene algo que no es fácil de encontrar ni de lograr: un tono y un estilo propio que es difícil de describir pero que necesariamente se percibe cuando se ven sus trabajos; una manera de decodificar al mundo y re-codificarlo en sus películas muy particular, agridulce, un humor leve que convive constantemente con un dramatismo leve; situaciones comunes, típicas, reconocibles y a la vez aproximaciones intimistas.
Y además tiene una perspectiva feminista y del mundo de la mujer muy aguda y sensible.
Toda su filmografía es buenísima, pero destaco sus últimas tres películas:
«Los Marziano»: la historia de dos hermanos distanciados que se reencuentran, con un guion oscuro, perturbador y a la vez cómico, y con actuaciones excelentes, sobre todo de Mercedes Morán y Rita Cortese, que están acompañadas por Arturo Puig y Guillermo Francella.
«Mi amiga del parque»: Uno de los mejores trabajos de Julieta Zylberberg, que encarna a una madre primeriza sola y vulnerable, y también de la misma Ana Katz, que co-protagoniza el filme, con un muy buen manejo del suspenso y una enorme capacidad para ser inquietante sin caer en sentencias o axiomas sobre sus personajes.
Y finalmente «Sueño Florianópolis»: un retrato nostálgico y a la vez divertido; crítico y a la vez compasivo de las vacaciones en Florianópolis, a principios de los 90, de un matrimonio casi divorciado y sus hijos.