Por Mayrin Moreno Macías
El mago profesional y profesor de teatro David Domínguez estudió efectos especiales cuando vivía en España. En ese tiempo aprendió a elaborar máscaras y productos para magos, así que estos días aprovechó esos conocimientos y comenzó a fabricar máscaras cubrebocas que, además de proteger, son originales y divertidas. Los diseños son de personajes como Hannibal, el Joker o Sub Zero, y también de hombres lobo, calaveras o zombies. Pero hay otros modelos en proceso que podrán ver en el Facebook “Uróboros FX”.
“Estas máscaras poseen un diseño tridimensional realizado en látex. El látex da resistencia y durabilidad al cubreboca, además de que no deja pasar el viento pero sí permite respirar cómodamente, lo que las hace ideales para andar en moto. En la parte interna cuentan con doble capa de tela para brindar protección, esta doble capa se realiza para cada modelo, acompañando la forma interna de la máscara y proporcionando buen calce y gran comodidad. Son livianas, flexibles y se pueden lavar”, explica David.
–¿Cómo vive un mago en cuarentena?
–Pienso que es una situación complicada para la sociedad en su totalidad, porque hemos tenido que adaptarnos a grandes cambios, priorizando la salud ante todo. Y por supuesto nos hemos visto afectados en nuestras actividades, nuestro ritmo de vida y nuestra economía. La cuarentena para los magos y los artistas en general es una situación muy preocupante, ya que las actividades artísticas son las últimas que van a volver a la normalidad. En nuestro caso particular, tanto mi esposa como yo, que nos dedicamos a la enseñanza de teatro, hemos tenido que suspender nuestro taller y normalmente damos clases en jornada extendida de las escuelas, pero este año no han comenzado.
David en su trabajo creativo refleja su amor por la fantasía y lo extracotidiano. Esta fórmula la aplica tanto en las máscaras que realiza hoy como en sus shows de magia, cuando crea espectáculos teatrales para niños desde el guion hasta la escenografía y el maquillaje, y cuando fabrica títeres y efectos especiales o productos para magos.
“Creo en la magia porque creo en lo fascinante que es compartir con otros la hermosa experiencia de, por un momento, vivir lo imposible dentro de un entorno de realidad. La magia es parte de mi vida porque no la imagino de otra manera, por la necesidad de compartir, de comunicar, por el placer que genera en uno y los demás, porque es una forma de ver el mundo. El camino en la magia no ha sido siempre igual, en algunas etapas me he podido dedicar más y en otros momentos no le pude dedicar todo el tiempo que me hubiera gustado, pero me dio siempre grandes satisfacciones. Los magos siempre vamos probando las diferentes ramas del arte, pero podría decir que en este momento concentro mis energías en la magia de salón y en la magia para niños. Admiro a muchos magos, que son referentes para mí de un modo u otro, sería larga la lista si los nombrara, pero siempre busco desarrollar mi estilo propio, que es la mejor forma de expresarme”, dice.